El extraño caso del profesor BERINGER

Se cuenta la anécdota del profesor Beringer (1667-1738), de Würzburg... víctima de una estúpida broma por parte de sus discípulos, muriendo poco después de aflicción.

Los estudiantes fabricaron toda clase de fósiles en arcilla, enterrándolos después, en los lugares donde el profesor Beringer solía ir a buscarlos... para después describirlos con todo lujo de detalles...
... hasta que...  desenterró un fósil en el que estaba escrito su propio nombre...

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Existen otras versiones de esta historia:

... uno de los falsificadores era el amante de la mujer de Beringer, para ponerlo en evidencia de esta manera tan singular.

... la "culpa" fue de los jesuitas ("tener manía" a esta orden religiosa fue/ha sido muy frecuente), cuyo fin sería desprestigiar a un científico incómodo.

... otros afirman que el culpable fue Georg Ludwig Haeber, con el fin de burlarse de Beringer.

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PERO... ¿QUÉ SUCEDIÓ, EN REALIDAD?

PROBABLE (¿?) película de los hechos...

Beringer no sólo enseñaba historia natural, sino que también era decano de la facultad de medicina y médico de cabecera del príncipe obispo.
TANTA CARGA HONORÍFICA... (es de suponer), llevaría aparejadas ciertas envidias.
Sus contemporáneos resaltaban su proverbial cristianismo, además de la terquedad y carencia de espíritu crítico.

1724: Beringer encuentra  en los alrededores de Würzburg extrañas formas de admirable realismo... ranas en pleno acoplamiento, una araña capturando a una mosca, soles, medias lunas, cometas, ... e incluso inscripciones hebraicas con la palabra “Jehova”.

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Era un coleccionista de toda clase de curiosidades que caían en sus manos... el creía que se trataban de maravillas creadas por Dios. Hasta las piedras preciosas eran consideradas por Beringer como “mudos y explícitos testigos de la perfección divina”.
En cuanto a la palabra “Jehova” y otros signos hebraicos, Beringer consideraba que... ¿por qué Dios no podía crear plantas, animales y astros de piedra y firmarlos con su nombre, para recordárselo a los hombres....”cuando éstos se olvidaran del creador”?

Los responsables: tres jóvenes que procedían de familias pobres... que consiguieron engañar a Beringer y a (casi) toda la ciudad de Würzburg... llegando a reunir 300 escudos imperiales (suma elevadísima por aquel entonces).

No se conoce con exactitud cuál fue el motivo por el que se descubrió el engaño y se apuntan varios:

-El descubrimiento de "fósil" con el nombre de Beringer.
-La (probable) avidez mercantil ("matar la gallina de los huevos de oro") de los jóvenes "falsificadores"
-El autor espiritual de la obra fuese a contárselo al príncipe obispo para desprestigiar a Beringer; (si éste fue el motivo, su promotor no obtuvo el éxito esperado, ya que Beringer no cayó en desgracia y conservó todos sus cargos).

Sea como fuere los tres jóvenes se encontraron ante el juez acusados de haber fabricado, enterrado y vendido “fósiles”. Pero los hermanos Hehn acusaron a un tal Zänger de haberlos inducido...
Zänger, a su vez, pasó la responsabilidad a dos profesores de Wurzburg, los cuales habían trazado tan maquiavélico plan para desprestigiar al profesor Beringer “porque era soberbio y les despreciaba”.

Uno de los acusados era Johann Georg von Eckhart... historiador y bibliotecario de la Universidad y de la Corte.
Ignaz Roderique, que ocupaba la cátedra de geografía, álgebra y análisis, era "el otro"...

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Beringer decía que eran “unos advenedizos sin ninguna experiencia en el trato con los fósiles” y “hombres que no pintaban nada en el mundo de la Ciencia”.

Eckhart (al parecer) fue el que dividió la historia humana en tres grandes épocas: Edad de Piedra, Edad de Bronce y Edad de Hierro.
Sin embargo, la envidia y la vanidad no le eran ajenas... tampoco "otros defectillos"... durante algúnt tiempo y a consecuencia de las deudas,  desapareció de Hannover y anduvo oculto por varios monasterios...
Era protestante, pero no tubo reparo alguno en "pasarse" al catolicismo para intentar conseguir algún cargo en alguna universidad católica. Esta era una de las razones por la cual Beringer, devoto católico, no podía soportarle.

Una vez descubierto el engaño, el príncipe obispo retiró el encargo a Eckhart de escribir la historia de Würzburg, ya que <<no existían garantías de que un falsificador de fósiles no hiciese lo mismo con las actas y los documentos del archivo>>.

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A pesar de todo, Beringer... siguió convencido que la mayoría de las piedras eran auténticas:
“por envidia se había hecho llegar a sus manos alguna que otra falsificación..... No por eso dejan de ser auténticas todas las figuras de piedra encontradas, del mismo modo en que no son falsas todas las monedas antiguas y todas las viejas obras de arte por el hecho de que exista la falsificación de monedas y de obras artísticas”

... y es que...  la "vis plastica" o "vitis formativa"... que consideraba a los fósiles caprichos de la naturaleza... era una teoría perfecta para explicar la existencia de restos "similares" a los seres vivos... sin necesidad de aceptar largos periodos de tiempo... por lo que... podía aceptarse la (corta) cronología bíblica

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http://bibliodyssey.blogspot.com/2006/08/fossil-fakes.html